¿Qué necesitan nuestros sindicatos para tomar la calle?
El amo ZP ha decidido pasar a la acción y emprender un importante recorte en el gasto público, Europa aprieta y no resulta tan sencillo engañar a los habitantes de más allá de los Pirineos. Las previsiones no son buenas y no son pocos los agoreros que hablan de la expulsión española del euro.
Sube el IVA, aumentan los tipos del IRPF, la edad de jubilación se retrasa hasta los 67 años, disminuyen las pensiones de nuestros mayores, bajan los ingresos y no se toman medidas adecuadas para paliar la lacra del mayor cáncer de la economía española, el paro.
Simultaneamente, se mantienen los Ministerios de Vivienda e Igualdad con el importante gasto que supone. y la Administración del Estado mantiene en su puesto a un excesivo número de altos cargos, un 35% más que en las legislaturas "Aznar".
Mientras Pedro Solbes disfruta en su casa de una jugosa jubilación, la situación de miles de familias españolas se ha hecho insoportable y llegar a fin de mes es una quimera. Tres de cada cuatro españoles no confían en Rodríguez y en Salgado y piensan que el ejecutivo está gestionando mal la crisis, a la vez que afirman mayoritariamente que el PP administraría mejor nuestra maltrecha economía.
Toxo y Méndez, las dos caras marionetas que emboban a los trabajadores, siguen sin alzar la voz y no han planteado a sus sindicatos la remota idea de una Huelga General.
CCOO y UGT, fieles al poder establecido, tosen despistados ante los atropellos del Gobierno y miran hacia otro lado ante los lastimeros gritos de la clase obrera. Las subvenciones tienen demasiado peso en nuestra sociedad del bienestar.
¿Cuál sería la situación con un gobierno de derechas en el poder?
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