Menudo revuelo el que ha levantado el ex ministro popular con sus declaraciones sobre los acercamientos entre ETA y el PSOE.
Los socialistas, de neuronas cortas, parecen haber olvidado muy pronto que fue este señor el que denunció que el presidente Rodríguez, mintiendo a millones de españoles (once millones reciben la burla encantados) se sentaba con los terroristas dando la espalda a la democracia y desoyendo los consejos de especialistas y técnicos. El resultado lo conocemos todos, payasada en el Congreso (muchas conciencias afectadas), rearme y asesinatos de la banda.
Oreja, con el sentido común por bandera, ha puesto sobre la mesa las bases del nuevo acuerdo: "Las actitudes en el entorno de ETA y del Gobierno certifican que se está ya en la segunda parte del proceso de negociación. Se pretende marcar una diferencia entre ETA y la izquierda abertzale pero eso es imposible. Ahora ETA no está en la tarea de organizar comandos sino en la tarea política de avanzar en el proyecto de independencia. Se trata de que se den pasos sucesivos en la dirección de la negociación".
La presidenta del Parlamento vasco ha echado más leña al fuego, y aunque afirma que aunque no ha visto a los socialistas negociar, no pone la mano en el fuego por Zapatero o el lehendakari Patxi López.
Mientras tanto, los españoles ya disponemos de una ley que impide a los abertzales entrar en las instituciones, y expulsarlos de ellas si han conseguido representación. Una reforma promovida por el Partido Popular que ha llegado a nuestras Cortes con "cierto" retraso. Decenas de localidades vascas y navarras siguen regentadas por terroristas que reciben sus asignaciones presupuestarias de nuestro bolsillo. Las prisas son malas consejeras...
Mariano Rajoy ha pedido que se escuche a Mayor Oreja en temas relacionados con el terrorismo, ya que ha sido un extraordinario ministro del Interior y tiene un profundo conocimiento sobre la materia.
Y lo que resulta más impactante, cuando oigo hablar de ETA y PSOE recorren mis neuronas las palabras chivatazo, Garzón, Faisán...
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